Durante los días del 5 al 7 de marzo se celebró en la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol el Solemne Triduo al Santísimo Cristo de los Remedios. El Señor de Castilleja de la Cuesta presidía uno de los cultos más íntimos de la Cuaresma alixeña.
La sagrada cátedra fue presidida por el Rvdo. Padre D. Alfonso José Filiberto del Castillo, Párroco y Director Espiritual de nuestra Hermandad, quien estuvo acompañado por el Rvdo. P. Agustín, superior de los Hermanos del Amor Misericordioso.
El culto comenzó diariamente a las 19.30 horas con el siguiente orden: Rezo del Santo Rosario, Letanías de la Preciosísima Sangre, Ejercicio de la Cinco Llagas y Sagrada Eucaristía.
El altar efímero instalado para la ocasión por la Priostía de la Hermandad estuvo presidido por el Santísimo Cristo de los Remedios en el Santo Sepulcro, dispuesto para la ocasión a una altura elevada. Acompañaban a ambos lados las imágenes de la Dolorosa del siglo XVIII, atribuida al barrista Cristóbal Ramos, y San Juan Evangelista del siglo XIX que se veneran en la Capilla del Calvario de nuestra sede canónica. Sobre varias gradas se dispuso candelería con cera de color blanco distribuida de forma escalonada. En la parte superior, se encontraba la imagen del Santo Cristo. En ambos lados se colocaron dos credencias. El conjunto carmesí lo completaba el juego de seis jarras con una combinación de flores en tonos violáceos y rojo purpúreo. Dicha composición estaba formada por rosas, liliun y astromelias.
El Triduo, que contó con una gran afluencia de fieles y devotos todos los días, fue acompañado musicalmente por el coro litúrgico 'Nuestra Señora de la Soledad'. Además, durante los tres días la Diputación de Caridad recogió alimentos no perecederos.
TEXTO: Gregorio Quesada Rubiano.
FOTO: Antonio Jesús Sánchez Guerra.