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Periodista de profesión, el pregonero de 2024 es Archivero de nuestra Hermandad, además de Auxiliar del área de Comunicación y director del anuario 'De Santiago'. Natural de Castilleja y placeño de cuna, además de miembro de nuestra corporación, es hermano también de la hermandad Sacramental de Gines, de la Agrupación Parroquial San Ginés y de la Hermandad del Silencio de Sevilla.

En 2014 pronunció el Pregón de la Semana Santa de Gines y en 2017 el Pregón de la Navidad de esta misma localidad, a la que está muy vinculado, siendo autor además del libro «Hijos del Aljarafe».

El próximo 9 de marzo pronunciará el XXXV Pregón de la Hermandad Sacramental de Santiago Apóstol.

¿Cuál fue su primer pensamiento al conocer la decisión de la Junta de Gobierno sobre su designación?

Pues fue toda una sorpresa porque me llamó José Antonio, el hermano mayor, allá por el mes de mayo. Había estado hablando con él la tarde anterior sobre diversos asuntos de la Hermandad y, cuando vi la llamada, pensé que era para concretar algo sobre lo que habíamos hablado el día antes. Además, la fecha en la que se produjo la llamada, a principios de mayo, no hacía presagiar en absoluto que fuera por ese motivo, así que fue totalmente inesperado. En cualquier caso, le dije que sí inmediatamente y que le agradecía enormemente la confianza de la Junta.

¿Nos podrías decir qué recuerdo o vivencia que hayas vivido en la Hermandad te ha marcado más?

Hay muchos, sin duda, pero uno de ellos ocurrió hace relativamente poco y me sigue emocionando muchísimo cada vez que lo recuerdo. Fue el 7 de octubre de 2021. Ese día ofrecí una conferencia en la Casa de Hermandad sobre «La Virgen del Rosario y la Batalla de Lepanto». Al concluir, el entonces hermano mayor, Paco Luque, me invitó a participar en el traslado del Señor desde el Sagrario a la capilla del Calvario. Fue un momento de gran intimidad y cercanía por el que siempre estaré agradecido.

¿Qué le inspira cada uno de nuestros Titulares?

Dicen que lo que sucede en la niñez, ocurre para siempre. El Santísimo Cristo de los Remedios y Nuestra Señora de la Soledad están en mí desde la infancia, desde que tengo memoria. Hablando del Señor, una vez escribí que "quizá mi mente se niegue a recordar aquel primer encuentro para no poner a lo nuestro ni siquiera el límite de las horas". Eso es justo lo que significan, son parte fundamental de mí mismo, me acompañan desde siempre y no sabría explicarme sin ellos.

¿Prosa o verso? ¿Sabe ya cuál será la forma literaria escogida para el pregón?

Creo que la forma debe de estar al servicio de lo que se quiere expresar en cada momento. Por eso, se combinan prosa y verso en el pregón. Ambos son herramientas del mensaje. El camino de la belleza es una vía fundamental para la evangelización. La belleza también predica y abre las puertas de la Verdad y la Bondad. Esa es la premisa que vertebra el pregón. Por eso, el verso va a tener un peso indudable. Dice Dámaso Alonso que toda poesía es religiosa. Yo añadiría que, además, toda poesía encierra una sorpresa por su carácter singular en el lenguaje. En este sentido es, en cierto modo, como Jesús: lo inesperado, lo que parece imposible y finalmente no lo es, resulta ser su esencia. Su verdadera firma.

¿Ha encontrado muchas dificultades a la hora de ponerse a escribir?

Escribir nunca es fácil, ni siquiera para quien está acostumbrado a hacerlo. Para mí, la escritura más que una creación es un descubrimiento. Las palabras que decimos o escribimos cuentan nuestra historia, la elección nunca es fortuita, lo que cuentas y cómo lo cuentas ya está en ti y, al escribirlo, lo descubrimos, nos los descubrimos a nosotros mismos y a los demás.

Si tuviera que describir su Pregón, ¿qué palabra o expresión emplearía?

Creo que la mejor forma de describirlo es con su título: «Una voz encarnada», que tiene un significado doble. Por una parte, la palabra de Dios hecha carne en Cristo, y por otra la palabra de los placeños de la Historia, que siempre supieron hablar del Señor y de su Madre con un lenguaje teñido de rojo, es decir, encarnado.

¿Va dedicando a alguien en especial?

La dedicatoria está muy cara: a mis padres. De hecho, considero que toda mi vida está dedicada a ellos, a su memoria y a su ejemplo de amor. Pero el pregón tiene una segunda dedicatoria para todas las personas que, incluso sin darse cuenta, a través de sus obras, de sus palabras o con un simple gesto, me han enseñado a ser de la Plaza.

¿Qué supone en la vida de José Rodríguez Polvillo dar el pregón de la Semana Santa de nuestra corporación?

Por supuesto es, ante todo, una gran ilusión y una enorme responsabilidad. Además, está siendo una gran oportunidad personal para poder ahondar en sentimientos en los que no solemos detenernos en el día a día. Escribir sobre algo siempre es una ocasión para pararse y pensar determinadamente sobre aspectos en los que generalmente no nos paramos por las prisas de la vida. Por todo ello, estoy muy agradecido a la Hermandad, ya que está siendo un momento muy especial para seguir ahondando en mi Fe. En cuanto al día del pregón, estoy seguro de que lo recordaré siempre con un vuelco al corazón.

Si es tu deseo, puedes aprovechar estas últimas líneas para mandar un mensaje a todos nuestros hermanos.

Un pregón es, por definición, una proclama, un anuncio. Esa es su misión y en ese tono está escrito. Me gustaría que los hermanos y devotos pudieran encontrar en él la palabra que cada uno de ellos necesite oír en ese preciso momento. Espero de corazón que, con la ayuda de Dios, pueda colaborar en la medida de lo posible a fortalecer la Fe de los que lo oigan y su orgullo por ser de la Plaza.

Entrevista realizada por: Jesús Bueno Ruiz.