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Devoción al Cristo de los Remedios

La talla del Santísimo Cristo de los Remedios fue atribuida en su día al escultor Marcelino Roldán, hijo del Ilustre Pedro Roldán, por el Profesor Jorge Bernales Ballesteros. Realizada en torno a 1703, esta escultura de Cristo Yacente, con articulación en los brazos, aparece ya registrada en el inventario que realiza la Hermandad en el año de 1726: "Ntro.Señor Jesuchristo de talla y estatura quasi corporea natural...", además de "su féretro de madera pintada de blanco y flores". Poseía desde su realización una doble finalidad; la de ser enclavado en la cruz, para el Sermón del Descendimiento, y procesionar como Cristo Yacente la tarde del Viernes Santo.

En cuanto a las restauraciones a la que ha sido sometida la talla del Cristo, tenemos recogidas tres de ellas, la primera correspondiente a fines del siglo XVIII, tras la fusión llevada a cabo con la Hermandad de la Veracruz; la segunda en 1985 por el profesor Francisco Arquillo Torres; y la tercera en 2014 a cargo del mismo especialista.

La primera de estas intervenciones viene recogida en el libro de Datas de la Hermandad correspondiente al periodo (1797-1885). Así, en las del año 1798 se recoge la siguiente información: "Ytem. se le hace cargo de la limosna que se junte para retocar el Señor ciento y ochenta reales...180. Ytem. Es data de la composición del Señor, como consta de recibo doscientos cuarenta y dos reales...242".

La talla del Cristo posee una composición enérgica e influjos barrocos traducidos por medio del patetismo. En cuanto a la anatomía, existe un estudio esmerado en el tratamiento de calidades carnosas, consiguiendo una cierta blandura. Interesante es el tratamiento de cabellera, en el que la gubia ha marcado con precisión cada mechón, conformándose por otro lado en masas compactas. En 1980 procesiona por las calles de Castilleja de la Cuesta el Cristo de los Remedios por vez primera en Vía-Crucis durante su trasladado al Santo Sepulcro cada tarde de jueves de Pasión.

 

La segunda intervención o restauración a la que hacíamos mención, fue la realizada en 1985 por el profesor Francisco Arquillo en las dependencias de la Casa de Hermandad. Tras un buen estudio respecto a su estado de conservación las tareas fueron mínimas. Se le realizó una limpieza completa, se le fijaron los brazos con unas espigas de madera, se le cubrieron, los agujeros de las potencias y finalmente se le restituyó la policromía que le faltaba.

En noviembre del año 2014, la imagen del Santísimo Cristo fue intervenida de nuevo por el profesor Francisco Arquillo Torres. El Señor fue sometido a un proceso de limpieza de la policromía, reparándose también partes desgastadas y dañadas por el paso del tiempo.

 

TEXTOS: Juan Prieto Gordillo
Profesor de la Universidad de Huelva
Historiador de la Hermandad